En el dialecto kimbundo, la palabra Kilandukilu significa diversión, y ese es justamente la visión que transmite este grupo en sus actuaciones. Para ello, usan los elementos de la naturaleza, como el fuego, para transmitir esa energía que procede la tierra misma.
La idea de estos artistas es rescatar el folclore propio de su país mediante las distintas manifestaciones tradicionales, que se funden entre el baile y la música.
Durante sus presentaciones, usan varias vestimentas propias de sus tradiciones y del resto del continente africano, juegan con elementos como los instrumentos musicales de percusión, como el djembé, el reco.reco, batuque, gaietas, etc y algunas armas decorativas
Sus coreografías dejan boquiabiertos a muchos, pues sin duda el profesionalismo y el esfuerzo se ven reflejados en su sincronía y excelente coordinación en cada uno de los movimientos ejecutados en su tiempo y espacio.
Como agrupación lleva cerca de 23 años recorriendo, desde su natal Angola, escenarios de Corea, Suecia, Cuba, Polonia, Brasil, Alemania, Portugal, Japón, Costa Rica y España.
Sus participaciones les ha hecho merecer varios premios en festivales y simposios por su trabajo de rescate de sus tradiciones.