Gajes del oficio: Son las molestias, perjuicios o preocupaciones que se experimentan con motivo del empleo o profesión. Antiguamente, se llamaba gaje a la "paga que se percibía por un empleo determinado". Circula una deformación festiva que dice gajos del oficio, aplicado en broma a los productores de "cítricos".
Gastar pólvora en chimangos: Desperdiciar tiempo o esfuerzo inútilmente. El chimango es un ave de rapiña propia del Río de la Plata cuya carne no es aprovechable debido a su dureza y feo sabor.
Gastar saliva: Hablar inútilmente.
Gato con guantes no caza ratones: Es obvio que un felino calzado de guantes no podría lograr capturar ninguna presa. Aplicada en la vida cotidiana, la expresión advierte que debemos estar preparados adecuadamente para realizar determinada actividad y de no hacerlo así, fracasaremos en nuestro emprendimiento.
Gato encerrado: Los gatos eran bolsas para guardar el dinero que se llevaban encerradas, es decir, ocultas entre la ropa.
Genio y figura hasta la sepultura: No es fácil cambiar de modos de pensar, vivir y actuar. La persona que nace con ciertas características, difícilmente las altere a lo largo de su vida.